El Halloween o la noche de brujas también ha sido adoptado por algunos mexicanos. Desde el 31 de octubre, niños salen disfrazados a la calle pero en lugar de pedir dulces, piden ‘calaverita’, dinero. Forma parte del Día de Los Muertos.
En un altar se dejan elementos como fotografías, veladoras, calaveras, comida y bebida para deleite del visitante del otro mundo para celebrar el Día de Muertos, el día en que los difuntos visitan el mundo de los vivos.






La celebración de Día de los Muertos es sin duda una gran tradición, que difunde valores de respeto y convivencia y ha sido reconocida por la UNESCO como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad: La UNESCO, único organismo especializado de las Naciones Unidas cuyo mandato trata específicamente de la cultura, se asocia a esta celebración recordando que las festividades indígenas por el Día de Muertos, como se le conoce popularmente, forman parte de la Lista del Patrimonio Cultural Inmaterial, al tiempo que enfatiza la importancia de su significado en tanto se trata de una expresión tradicional -contemporánea y viviente a un mismo tiempo-, integradora, representativa y comunitaria.